Protezione con antirotazione a doppia guida e controllo della corsa PR-A-F
Protección con antirrotación de doble guía y control de la carrera PR-A-F
Protección con antirrotación de doble guía y control de la carrera PR-A-F
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Presupuesto
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario a l’husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario al husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario al husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario al husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario al husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario al husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario al husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario al husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario al husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario al husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario al husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario al husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario al husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.
Como todos los martinetes deben tener un contraste a la rotación, si no es posible realizar este vinculo externamente es posible, para los modelos TP, la realización de un sistema anti-rotación interno en el martinete. En la protección rígida PR están montadas, por medio de unos pernos soldados, dos guías sobre las que se pueden deslizar un casquillo de acero tratado antigripaje Keniflon que se mantiene solidario al husillo. En caso de carreras muy largas, es necesario verificar que el deslizamiento de torsión no es tal como para forzar los tornillos de fijación de la PR-A en el casquillo de guía. Puesto que la antirrotación interna vincula el husillo con su terminal, en caso de presencia de agujeros o asimetrías es necesario indicar su posición. Para satisfacer la necesidad de controlar electrónicamente la carrera es posible montar en una protección rígida soportes adecuados para los finales de carrera. En la versión estándar estos soportes son dos y están situados en los dos extremos de la carrera. En la protección rígida se realizan dos ranuras en las que se montan los soportes para los proximity. Estos soportes están constituidos por dos semi-anillos que permiten una amplia posibilidad de ajuste en el montaje del sensor. la presencia de una junta tórica en una de las dos semi-anillos asegura la estanqueidad evitando la intrusión de cuerpos extraños y de líquidos. El sensor de proximidad se fija en una tuerca incrustada en el molde del semi anillo incluido en el suministro. Si fuese necesario aplicar múltiples sensores, se pueden realizar diferentes fresados donde sea necesario. Para permitir el funcionamiento del interruptor del final de carrera, en el extremo del husillo está montado el casquillo BU.